El término “esteem”, elegido por los responsables de la marca alemana Diplomat para bautizar a una de sus colecciones de instrumentos de escritura, significa literalmente “estima” o “aprecio” y da una buena idea de la motivación y el objetivo perseguido con la salida al mercado de este hermoso conjunto de plumas estilográficas, bolígrafos y rollerball. Éste no es otro que satisfacer la demanda de un público que rehúye de la ampulosidad y los excesos ornamentales, que valora la funcionalidad por encima de todo, y que, sin renunciar a la elegancia o la belleza, sitúa su foco de atención en las cualidades intrínsecas de las piezas. Este aprecio por la sencillez y por el sentido práctico de las cosas tiene pues un excelente aliado en las plumas estilográficas y demás objetos de escritura de la colección Esteem, un magnífico repertorio de útiles caracterizados por sus líneas puras, limpias y elegantes, su porte clásico, sus sobrios acabados, despojados de toda artificiosidad, y, sobre todo, por su espléndido rendimiento, que supera con creces el exigente reto de un uso intensivo y convierte su utilización en un auténtico deleite por sus grandes virtudes a nivel práctico, desde la solidez que aporta el abundante empleo de metal en su confección, hasta la comodidad que proporcionan sus dimensiones y su excelente balance de pesos, idóneos para la realización de largas sesiones de escritura evitando la fatiga o las dolencias que provocan en ocasiones otros útiles carentes de una buena ergonomía y un buen equilibrio o, simplemente, excesivamente pesados. Se puede concluir por tanto que, más allá del atractivo estético de sus formas desnudas y refinadas, el verdadero aprecio por la colección Diplomat Esteem y la auténtica valoración de sus fantásticas cualidades están definidos por su uso, que es el que nos situará ante la auténtica dimensión de su calidad y, directamente relacionado con ésta, su espléndido precio.